Tratamiento del linfedema

El linfedema es una acumulación anormal de líquido rico en proteínas en los tejidos que causa inflamación debido a una obstrucción del sistema linfático. El linfedema se encuentra más comúnmente en los brazos y las piernas, pero también puede afectar el tronco, el cuello, el pecho y los genitales. El inicio es gradual en algunos pacientes y repentino en otros.

Hay dos tipos: linfedema primario y secundario. El linfedema primario también se conoce como linfedema congénito. Esta condición puede estar presente al nacer, pero con mayor frecuencia se desarrolla más tarde en la pubertad. El tipo más común es el linfedema secundario, que resulta de una cirugía o radiación por cáncer, infección, trauma, tumores malignos e insuficiencia venosa crónica.   

Los signos y síntomas del linfedema pueden incluir:

  • Sensación de plenitud o pesadez del brazo o la pierna afectados.
  • Hinchazón en parte o todo el brazo o la pierna, incluidos los dedos de manos y pies
  • Dolor o molestia en el brazo o la pierna.
  • Cambios en la piel (rigidez, engrosamiento, endurecimiento)
  • Ajuste apretado del brazo o pierna afectados en la ropa

En el Centro Médico Regional de St. Mary's, brindamos educación y tratamiento para el linfedema a través de la Terapia Descongestiva Completa (CDT), que consiste en lo siguiente:

Drenaje Linfático Manual (MLD)

Esta es una técnica manual suave diseñada para afectar el líquido y los componentes linfáticos superficiales para desviar el líquido de las áreas bloqueadas y aumentar la ingesta de líquido en el sistema linfático.

Terapia de compresión

Este componente de CDT se logra mediante la aplicación de vendajes de compresión multicapa o el uso de una prenda de compresión para evitar la reacumulación de líquidos y mejorar el retorno venoso y linfático.

Los ejercicios de recuperación se realizan con vendajes de compresión o una prenda de compresión que se usa en la extremidad afectada. Estos ejercicios ayudan a aumentar el retorno del líquido linfático al sistema circulatorio. El cuidado meticuloso de la piel y las uñas puede ayudar a minimizar el riesgo de infección o exacerbación del linfedema.